Poder… También Puedes Pedir Ayuda ©

Como padre, madre, pareja, como hermanos mayores, como maestros, tutores, mentores y en general como cualquier rol en el que seamos responsables del bienestar de alguna otra persona (al menos en algún área de su vida), nos empeñamos en transmitir a esa persona de la que nos sentimos responsables la seguridad de que puede y podrá hacer todo lo que se proponga, decimos y hacemos todo lo posible por transmitirle esa sensación de poder que le de la seguridad de que no hay mi habrá imposibles para ella.

Tu puedesGeneralmente utilizamos frases como «tu puedes», «claro que puedes», «sí lo lograrás», «no te rindas» sin reflexionar en qué significado le está dando la persona a las que están dirigidas y qué acciones tomará en base a ellas ni bajo qué circunstancias.

El poder como posibilidad de hacer algo debe estar siempre enmarcado en valores, circunstancias, momentos y tiempos que impidan la autodestrucción y la destrucción de terceros. Este poder debe tener como prioridad primera la integridad física, emocional y espiritual de la persona y de quienes le rodean.

Es decir, por supuesto que es positivo y loable que plantemos en esa persona la idea de que todo lo puede, sin embargo es necesario que también se le explique que debe evaluar si lo que quiere hacer no le hará daño y que no dañará a quienes le rodean, y qué acciones tomar, cuando y bajo qué circunstancias tomarlas.

¿En qué momentos, cuándo y bajo qué circunstancias alguno de tus hijos podrían aceptar ir a una fiesta?, ¿En dónde, con quién, cuándo podría tu hija, alumno aceptar una copa?

Poder pedir ayuda

Frecuentemente se nos olvida acompañar ese «Tu puedes» por frases que impliquen auto conocimiento. Si no se reconocen y se aceptan las capacidades, gustos, conocimientos, experiencias de uno mismo será muy difícil saber en qué momento se puede pedir ayuda, se puede uno sentir cansado o se pueden pedir vacaciones.

Si no se le explica a la persona de la que uno se siente responsable que también puede pedir ayuda se le está negando la posibilidad de trabajar en equipo, de formar equipos, de Agotamientorodearse de personas que le complementen; si no se le dice que puede sentir cansancio es muy posible que en su empleo se le convierta en víctima de abuso porque su idea de que todo lo puede se va a imponer sobre su cansancio físico. Si no se le explica que también puede sentir cansancio y pedir ayuda la persona puede sufrir constantes estados de estrés, y  cansancio crónico, lo que puede llevarlo a enfermedades y/o impedimentos físicos difíciles de revertir.

¡Puedes pedir ayuda!, ¡Puedes sentir cansancio! son frases que deben complementar la «Tu puedes»

 

Sobre el autor: Moisés Pérez Cosgaya, coach y mentor de profesionistas, lo puedes encontrar en mpcosgaya.pro, te ayuda a lograr tus metas personales y profesionales con sus artículos y libros electrónicos gratuitos y con servicio de coaching – mentoring privado

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *