«No Soy Soltera, Soy Reserva Especial»
– María Félix –

Cuentos de Hadas

¿Recuerdas a las reinas y a las princesas de los cuentos infantiles?, Salvo algunas excepciones, en general las princesas parecen tener todo el tiempo del mundo para hacer nada o en su defecto, para hacer lo que otros les digan.
Las princesas de cuento son en general inexpertas, muy jóvenes, con sueños que se cumplirán «en algún momento», crédulas, ingenuas, bondadosas, altruistas, generosas, nobles, con tiempo de sobra y víctimas de las circunstancias.
Esas princesas esperaban la llegada o aparición de un príncipe que no tiene mayor ocupación y que por eso tiene todo el tiempo que sea necesario para encontrar a la princesa. Esos príncipes gastan el dinero del reino, dinero administrado por su mamá la reina y ganado vía impuestos a pueblos conquistados por su padre el Rey.
Por otro lado las reinas son en su mayoría decididas, audaces, experimentadas, maduras, responsables, dinámicas, observadoras, previsoras y muy conscientes del poder que tienen, mismo que no vacilan en utilizar.
[bctt tweet=»#Coaching Las reinas de cuento de hadas no vacilan en utilizar su poder»]
La Época Medieval
Durante la época medieval fue cuando las grandes monarquías del mundo tuvieron auge; vemos que las princesas tenían papeles francamente irrelevantes hasta antes de que se casasen y si es que eran pretendidas por algún aspirante al trono; vivían entre lujos y sin preocuparse por el costo de su etilo de vida. Su vida la dedicaban a prepararse para cumplir dos objetivos importantes:
- Desenvolverse en la corte
- Ser la mejor opción de esposa para el aspirante a Rey
La Reina tenía en cambio una papel mucho más relevante. Entre los múltiples objetivos que perseguían se encontraban:
- Gobernar
- Ser Confidente
- Tener un heredero
- Ser anfitriona real
Tenían mucho más responsabilidades y se ocupaban de asuntos de un ámbito mucho más amplio que su propia persona. En ausencia del Rey se ocupaban del reino, de la administración de la riqueza, de asegurar la continuidad del status quo y de proteger a su propia familia.
La Reina podía operar prácticamente de forma independiente al Rey cuando él estaba en el reino y mucho más si él se entraba fuera, sujeta tal vez a la influencia y protocolos y aún del poder de la Nobleza, pero siempre en la máxima posición de poder político y

económico. Baste recordar que Isabel La Católica fue quien convenció a Fernando VII de que la idea presentada por Cristóbal Colón era conveniente para el reino y que ella fue quien financió la empresa de exploración más impactante en la historia de la humanidad. Mientras Isabel atendía esos asuntos, Fernando se preocupaba por otros temas como la impartición de justicia, la guerra con los árabes y la cohesión del reino.
El poder de la Reina Isabel fue tanto y tan trascendental que incluso el ajedrez aún hoy en nuestros días la recuerda con toda su influencia. Cada vez que alguien juega ajedrez rinde homenaje a esta reina.
El Siglo XXI
Las Princesas
En nuestros días vemos Princesas, jóvenes dependientes económicamente,

emocionalmente y a veces intelectualmente de sus familias, inexpertas, ingenuas, y generalmente irreflexivas, con tiempo de sobra que derrochan igual que los recursos económicos de sus familias. Las princesas son hijas de papá y esa es una etapa en la vida de toda mujer que debe ser disfrutada y aprovechada para adquirir experiencia, conocimientos y habilidades para enfrentar la vida, invirtiendo en ello los recursos de su familia. Estas princesas buscan a sus contrapartes: Príncipes
[bctt tweet=»#Coaching Las Princesas son hijas de papá, adquieren experiencia, conocimientos y habilidades para la vida»]
¿Tú eres princesa, eres aún hija de papá, estás buscando un papá o un esposo, compañero de vida, un Rey?
La Reina

La Reina de hoy es la mujer cuya madurez nada tiene que ver con su edad, es independiente emocional y económicamente; tiene una vida propia y plena esté casada o no.
[bctt tweet=»#Coaching La Reina de hoy tiene o busca un Rey, NO a un príncipe o un papá»]

La Reina de hoy toma decisiones sobre opciones que ella misma ha descubierto, se abre paso con su nombre y apellido, aprovecha oportunidades, es amable, responsable y selectiva porque ella es la que selecciona, no permite que la seleccionen.
La Reina de hoy tiene vida propia, amistades, ocupaciones, trabajo, dinero, lugares y pasatiempos favoritos, está preparada para administrar la riqueza y hacer que cualquier reino prospere.
[bctt tweet=»La Reina del siglo XXI administra riqueza, hace prosperar a su reino»]
La educación de la Reina del siglo XXI está envuelta con una capa transparente de cultura general amplia y rica. Valora y hace valer su tiempo en relación a lo que sabe que puede lograr, a lo que puede disfrutar y; en su caso a lo que puede dar a quienes la rodean; se mantiene saludable y en forma sí, por vanidad pero también porque sabe que su estilo de vida le exige estar sana y en condición física óptima porque el inicio del siglo XXI ofrece una infinidad de opciones que ocurren en la inmediatez del momento y a ella le gusta ser una mujer actual.

La Reina de hoy busca o tiene un compañero con el cual forme, fortalezca, crezca, y enriquezca tanto su propia vida como la de él, con el cual unir fuerzas para tener un reino fuerte, pujante, dinámico y rico; la Reina del siglo XXI quiere como compañero a un Rey que respete por convicción tanto la libertad de ella como la suya propia, que sea al menos tan responsable, inteligente, maduro e independiente como ella.
[bctt tweet=»#Coaching La Reina quiere un Rey al menos tan maduro e independiente como ella»]
¿Qué eres, qué quieres ser; La Reina o una Princesa?